Toquilleras destacan impacto de la declaratoria del tejido del sombrero de paja toquilla como Patrimonio Inmaterial
Cuenca (Azuay).- Con una exposición y danzas, en el Parque Calderón de Cuenca, se conmemoró el cuarto año de inclusión del Tejido Tradicional del Sombrero de Paja Toquilla Ecuatoriano como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. El 5 de diciembre de 2012 la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Artesanos de 20 asociaciones y cooperativas toquilleras de las provincias de Azuay y Cañar mostraron sus productos como sombreros de tejido fino, carteras y adornos; y destacaron los impactos de tuvo la declaratoria en su labor.
Ana Ramón, del cantón Nabón, dijo que a raíz de la declaratoria el tejido de la paja toquilla ha tenido más promoción, lo que ha generado el interés de varias personas por aprender esta actividad. “Nos ha servido mucho, yo actualmente tengo 20 personas que están aprendiendo a tejer. Antes había mucha explotación porque había un solo lugar donde entregar los sombreros y nos pagaban lo que ellos querían”.
Por su parte Rosa Bravo, del cantón Sígsig, explicó que esta distinción le ha permitido participar en ferias y vender directamente sus productos. “Antes yo vendía un sombrero que no estaba acabado a 6 dólares y ahora que yo misma hago arreglar, por lo más bajo vendo a 15, 18, 20 o hasta 50 dólares”, dijo. Ambas artesanas acotaron que la distinción ha servido para mejorar la economía de muchas familias que se dedican al tejido de paja toquilla.
Mónica Quezada, directora del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) Regional 6, indicó que el compromiso del Estado para la protección del tejido tradicional del sombrero de paja toquilla se da través de la implementación del Plan de Salvaguarda, desde el 2013 con la participación de diferentes Carteras de Estado y cuya primer etapa finalizará el próximo año. Con este Plan, dijo la funcionaria, se busca mejorar las condiciones de vida de los artesanos.
Además resaltó que para proteger esta actividad artesanal y que se continúe realizando, se debe garantizar que el producto se comercialice, “porque la artesanía que no se vende es la artesanía que no subsiste”. Acotó que por este motivo se desarrollan ferias y exposiciones en donde los artesanos venden directamente sus productos. DVL / El Ciudadano.
