Carta al Presidente desde Francia: “Usted demostró al mundo entero que es posible hacer otra política”

La carta se detalla a continuación:

“Hace algunos años atrás, a partir de su visita oficial a Francia, sigo con especial atención su accionar político. Me fue de mucha utilidad el documental en dos partes, Operación Correa, realizado por Pierre Carles y Nina Faure, periodistas que usted conoció durante el rodaje de la segunda parte en Ecuador. La lectura de su conferencia en la Sorbonne, así como de su libro, De banana republic a la no república, traducido en francés y publicado en 2013, me permitió entender y apreciar los objetivos y la acción de la Revolución Ciudadana que usted ha impulsado. Quiero disculparme por dirigirme a usted en francés pero aunque pueda leer y entender perfectamente el español, me siento sin embargo, poco seguro por escrito. Sabiendo que usted entiende el francés me tomé esta libertad.

¿Porque le escribo, Señor Presidente? No soy ecuatoriano, pero quiero agradecerle. Agradecerle por el ejemplo que usted y su gobierno ofrecieron al mundo entero. Me devolvió la esperanza en la política. Yo nací en el año 1979 y desde siempre solo escuche hablar de crisis, de austeridad y de desempleo. Los gobiernos cambian pero la misma política neoliberal sigue. Peor aún, se hizo tal vez más neoliberal que en el pasado. Habría que estar ciego para no ver que eso no funciona y nunca funcionará. El paisaje político en Francia no propone ninguna alternativa desde hace mucho tiempo. Soy parte de esas personas que tienen la impresión que nos confiscan nuestro derecho al voto pidiéndonos que escojamos entre la peste y el cólera en las elecciones. De hecho ya no escojo.

Pero afortunadamente, en Ecuador, existe la Revolución Ciudadana que usted lleva desde hace diez años. Señor Presidente, demostró al mundo entero que es posible hacer otra política, que se puede colocar nuevamente al ser humano en el centro del sistema, que podemos sustraernos a la adoración del “dios dinero” para crear una dinámica nacional positiva, que podemos empezar a cambiar las mentalidades. Siempre me quedo maravillado por la cohesión y la fuerza  que emanan de los Enlaces Ciudadanos, que veo muy regularmente. ¿Qué otro jefe de Estado se toma la molestia de informar a la ciudadanía, cada semana, de la actividad de su gobierno? Es un gran ejemplo de lo que puede ser y tiene que ser la democracia hoy en día. Ha convertido el ‘decir la verdad’ y las acciones concretas en criterios de éxito político. Con su pasión, su sinceridad, con la fuerza de su palabra, que siempre está enfocada en la búsqueda de la verdad, hace que los discursos vacíos y las actitudes ridículas de la vieja Europa resulten totalmente obsoletos.

Hoy, aunque no tenga raíces en América Latina, me siento ecuatoriano de corazón. Soy profesor de historia y geografía. Ahora, cuando estoy enseñando a mis estudiantes, me siento orgulloso y feliz de poder hablarles sobre el Ecuador, como un ejemplo para el futuro. Los indicadores económicos y estadísticos demuestran el éxito de su política y la juventud europea debe saber que un mundo más justo es posible y sobre todo que es factible.

Finalmente creo, Señor Presidente, que el pueblo lo extrañará. Sin embargo, su decisión de no postularse a las elecciones presidenciales de este año me parece una hermosa lección de humildad y de democracia. Cuando un proyecto es realmente colectivo, puede perdurar y sobrevivir al que lo inició. Estamos al servicio de las ideas. Sepa, Señor Presidente, que me hubiese gustado estar en Ecuador para participar en esta década ganada. Reciba todas mis felicitaciones y la expresión de mi agradecimiento. Gracias desde el fondo de mi corazón en nombre de la humanidad. ¡Hasta la victoria siempre!”. /Carta de Ivan Brovelli traducida del francés al español- AVN El Ciudadano